viernes, 16 de febrero de 2018

Daniel Marra La increíble historia del zapatero argentino de Rod Stewart Tiene una fábrica en La Matanza y anoche el cantante lo hizo subir al escenario de Costa Salguero. "Rod es tan humilde que deja las Gucci y se pone las zapatillas que yo le regalo".

"Que suba mi amigo Daniel Marra", pidió anoche Rod Stewart en medio del show VIP de Costa Salguero. El ignoto Marra, autor de las exóticas zapatillas brillantes que Rod luce en cada show, subió tímido y se esfumó entre las 1.300 personas. Entonces comenzó el operativo "búsqueda del zapatero prodigioso". La mayoría lo rastreaba por el lugar equivocado. Casas de diseños palermitanas, circuitos fashion de la Ciudad de Buenos Aires. La historia de cuentos estaba en La Matanza.
Su fábrica en Lomas del Mirador es el templo heredado de su padre Osvaldo. Daniel tiene 50 años, 35 de oficio y más de 30 como fanático de Rod. En 2008 le obsequió un par a una saxofonista de la banda del inglés/escocés, ella quedo fascinada con el modelo y se abrió una puerta mágica.

En 2014 la mujer le entregó en mano a Stewart dos pares de mocasines confeccionados artesanalmente por Marra, uno de cuero anaranjado y otro de reptil multicolor, en Las Vegas.
Marra registró la marca de zapatillas Stay With Me, diseñadas especialmente para el caballero del imperio británico, pero no piensa en el negocio. "No tengo local aún, un amigo que vive en Las Vegas me aconseja abrir uno allá. No quiero lucrar con mi ídolo. Le obsequié ya más de 120 pares, cada vez que me ve dice 'Ahí está mi zapatero'", se ríe.

Rod Stewart prefiere las suelas matanceras
"Talla" como orfebre para el pie de Rod Stewart. Imposible calcular a cuánto podría vender las zapatillas con semejante modelo que las luce por el planeta. No es descabellada la escena:desde el entorno del artista cuentan que Rod se deshace a menudo de sus pares de Gucci y se calza el diseño personalizado de Marra.

Rod calza 42 y medio. Marra, moldista y "todoterreno" nacido en Ramos Mejía, demora entre 10 y 15 días para que Rod camine "como en las nubes". Todavía no exporta. Quiere ser cuidadoso, pero sabe que la explosión del emprendimiento es inminente.
"No es difícil hacerle zapatos a él, teniendo en cuenta que lo conozco de toda la vida", advierte Marra, cuya banda sonora de la juventud lo remite exclusivamente a Stewart. "Sé lo que le gusta y cómo combinar con lo que viste. Es el sueño de cualquier fan. Que con sus millones de dólares él elija los zapatos míos".

Don Osvaldo, un italiano oriundo de Avellino, fundó la fábrica en 1963 en La Matanza. Daniel, su hijo, piensa legarle la empresita familiar a su hija Julieta, de 19, que ayer también piso el escenario de Stewart. "Hubo épocas de vacas flacas. En los '90 este fue un gremio castigo, tuvimos que vender hasta los cordones, pero en las épocas malas y buenas aposté a esto. Lo llevo en la sangre y le digo a mis dos hijas: si querés, podés. Persevera y triunfarás". ver nota completa en su fuente: clarin.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario